En
primer lugar, debo confesar mi debilidad por este inteligente y hermoso animal.
Existe una leyenda amerindia que asegura que en tiempos muy antiguos los lobos
y los humanos hicieron un pacto, en el que se comprometían a respetarse
mutuamente. El lobo lo cumplió, pero el humano, como casi siempre ocurre, faltó
a su palabra.
El lobo forma parte de los mitos de distintas culturas y está presente en multitud de fábulas y relatos antiguos. Durante siglos ha competido con los humanos por la caza. Siempre en la cuerda floja, es admirado por muchas personas y rechazado y odiado por otras.
Leyendas y mitología del lobo
Los indios americanos afirmaban que los lobos blancos son portadores de buena suerte y que cuando una persona se tropieza con uno, o incluso sueña con él, significa que ese animal tiene la misión de protegerlo.
Los
shoshone, un grupo de tribus entre las que estaban en un principio los comanche,
pensaban que los lobos y los coyotes habían fundado el mundo, y que cuando una
persona fallecía su alma viajaba a la tierra del coyote, siempre bajo la atenta
mirada del hermano lobo.
Cuenta
una leyenda, que una mujer india encontró en el bosque un lobezno solo y
hambriento. La joven lo rescató y lo llevó con ella al campamento, donde le
procuró comida y cuidados. El animal creció y no se separaba nunca de su
salvadora. Un día, la mujer se dio cuenta que las huellas que los dos habían
dejado la noche anterior en la tierra húmeda, no eran las de un humano y un
lobo, sino la de dos lobos. Extrañada, fue a preguntar al chaman de la tribu,
quien le explicó que su amigo el lobo, en agradecimiento por haberle salvado la
vida, le había regalado el don de la doble existencia, ahora era humana y al
mismo tiempo loba. Esa noche, cuando ambos fueron a beber al río, en el agua se vio reflejada la imagen de dos
lobos.
Viviendo en manada
Los lobos viven en grupos que pueden llegar a los doce miembros. El macho y la hembra alfa son los dominantes, los que toman las decisiones importantes y generalmente los únicos que se reproducen.
A los alfa les sigue una pareja beta, que son los que ayudan a mantener el orden en el grupo y usualmente son los lobos de mayor tamaño.
El
aullido del lobo permite que los miembros de la manada se comuniquen entre sí
cuando están a cierta distancia. También lo utilizan para advertir a los lobos extraños
y así eludir el conflicto. Los aullidos pueden oírse a varios kilómetros de
distancia.
Reproducción del lobo
La hembra alcanza la madurez sexual alrededor de los dos años de edad y el periodo de gestación dura poco más de dos meses.
Cuando
los cachorros nacen, es la madre quien se ocupa exclusivamente de ellos hasta
las cinco semanas. Sin embargo, cada vez que sale de la guarida se frota con
otros miembros de la manada para impregnarse de su olor y que así los lobeznos
se vayan acostumbrando a él.
Autor de las fotografías: Carlos Sanz |
Alrededor de la quinta
semana de vida, la madre empuja a los cachorros a salir de la madriguera para
que se vayan familiarizando con el grupo. En ese momento entran en acción los
cuidadores, que son los lobos que la madre ha elegido para que eduquen a los
lobeznos, para que así ella pueda volver a sus obligaciones de hembra alfa. Estos
lobos pueden ser tanto hembras como machos, y la madre los elegirá entre los más
pacientes y equilibrados de la manada.
Beatriz Moragues - Derechos Reservados
Para saber más
A mí también me encantan los lobos :-)
ResponderEliminarGracias por la confesión ;-)
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